Monday 29 June 2020

LETANIAS PARA LAS ALMAS DEL PURGATORIO Y DE TODA LA HUMANIDAD

OH JESÚS, que sufriste y moriste para que toda la humanidad pudiera ser salvada y traída a la felicidad eterna. Oye nuestras súplicas, apiádate de las benditas almas del Purgatorio y ten piedad de estas almas:

Ayuda a mis padres y abuelos
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a mis hermanos, hermanas y parientes
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a mis padrinos y madrinas de confirmación
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a todos mis bienhechores
espirituales y temporales
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que han sido mis amigos y vecinos
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a cuantos debo amor y oración
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a cuantos he perjudicado y dañado
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que me han ofendido
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a aquellos a quienes profesas predilección
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que están más próximos a la unión contigo
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que te desean más ardientemente
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que sufren más
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que están más lejos de su liberación
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los más olvidados,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que menos auxilio reciben,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que más méritos tienen por la Iglesia,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que fueron ricos aquí, y allí son los más pobres
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los poderosos, que ahora son como viles siervos,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los ciegos que ahora reconocen su ceguera
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los vanidosos que malgastaron su tiempo,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los pobres que no buscaron las riquezas divinas,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los tibios que muy poca oración hicieron,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los perezosos que no hicieron obras buenas,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los de poca fe que descuidaron los santos Sacramentos,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los reincidentes que sólo por un milagro de la gracia se han salvado,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los padres que no vigilaron bien a sus hijos,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los superiores poco atentos a la salvación de sus súbditos,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los pobres, que sólo se preocuparon del dinero y del placer,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los de espíritu mundano que no aprovecharon sus riquezas o talentos para el servicio de Dios,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los necios, que vieron morir a tantos no acordándose de su propia muerte,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que no dispusieron a tiempo de su casa, estando completamente desprevenidos para el viaje más importante,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que juzgaste más severamente, debido a las grandes cosas confiadas a ellos,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los pontífices, reyes y príncipes,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los obispos y sus consejeros,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a mis maestros y guías espirituales,
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los fallecidos sacerdotes y religiosas
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los sacerdotes y religiosas de la Iglesia católica
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los defensores de la santa fe
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los caídos en los campos de batalla
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los sepultados en los mares y tierra
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que murieron en accidentes
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que sufrieron y murieron de enfermedad
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los muertos repentinamente
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los fallecidos sin recibir los santos sacramentos
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a los que van a morir en este día
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Ayuda a mi pobre alma cuando vaya a ser juzgada ante Dios Nuestro Señor
   Mi Jesús, ¡Misericordia!

Dáles, Señor, el descanso eterno. Y luzca para ellos la luz perpetua
para siempre, con Tus Santos, porque Tu eres Misericordioso.

Señor, oye mi plegaria,
y que mi clamor llegue a Tí.

Oremos
Oh glorioso Protector de las almas del Purgatorio, con todo el afecto de mi alma te ruego que interpongas tu poderosa intercesión en favor de esas almas benditas, consiguiendo de la Divina Clemencia la condonación de todos sus delitos y sus penas, para que saliendo de aquella tenebrosa cárcel de dolores, vayan a gozar en el Cielo de la visión beatífica de Dios. Y a mí, tu devoto siervo, alcánzame, la más viva compasión y la más ardiente caridad hacia aquellas almas queridas. Amén
Dáles, Señor, el descanso eterno. Y luzca para ellos la luz perpetua. Descansen en Paz. Así sea. Amén